Confesión

Woman praying in church

“En el sacramento de la penitencia, los fieles que confiesan sus pecados a un ministro legítimo, arrepentidos de ellos y con propósito de enmienda, obtienen de Dios el perdón de los pecados cometidos después del bautismo, mediante la absolución dada por el ministro, y, al mismo tiempo, se reconcilian con la Iglesia, a la que hirieron al pecar” (CIC 959).

El sacramento de la penitencia es indispensable para conocer el amor personal de Dios y crecer en la vida de gracia. Es absolutamente necesario en caso de pecado mortal antes de acercarse a comulgar y también la confesión de los pecados graves una vez al año (CIC 989)

Los sacerdotes de la parroquia están siempre disponibles al sacramento de la confesión cuando están libres y durante la celebración de la Eucaristía dominical.