El pasado sábado 15 de noviembre de 2025 los Montañeros iniciaban su marcha mensual sin saber que les esperaba la lluvia intensa y aún así disfrutaron de la montaña. Nos han compartido un montón de fotos y Guille nos cuenta su experiencia. ¡Muchas gracias!
En la marcha del 15 de noviembre partíamos a la Cruz de Rubens, ubicada en la sierra madrileña y rodeada de naturaleza y vistas espectaculares.
Nada más bajar del autobús, nos dimos cuenta de que el buen tiempo no tenía intención de acompañarnos, pero superando este primer obstáculo emprendimos el camino, siempre con la mirada puesta en lo alto y así amortiguando las piedras del camino.
A medida que íbamos subiendo, la lluvia, el viento y el frío eran cada vez mayores, pero solo ver como los mas pequeños iban afrontando todas estas dificultades y además con alegría, me hizo darme cuenta de la bondad de los niños y de la grandeza de Dios, el cual en esos momentos mas inhóspitos, te infunde su fuerza y te ayuda a continuar sacando lo mejor de ti.
Siempre es importante la prudencia montañera, y tuvimos que hacer uso de ella cambiando el itinerario de vuelta y así evitar llegar mas “calados” de lo que ya estabamos. Es en estos momentos en los que valoras las pequeñas cosas que en el día a día son tanto insignificamentes, y eso nos ayudó a darnos cuenta de lo afortunados que somos y lo poco que damos gracias a Dios por todo lo que Él nos ha dado.
Finalmente acabamos en la parroquia y tras una comida improvisada y una gratificante Eucaristía, concluimos nuestro día de marcha.
Guille Guerrero, cadete de la patrulla 6





























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